Ocaso

He visto el amanecer de muchos días,
He visto el comienzo de muchas vidas,
He visto el principio pero también he visto el fin.

El ocaso del día,
El ocaso de la vida,
El principio y el fin, el alfa y la omega.

Un ciclo continuo y eterno que rige la vida.
Busco el sentido…,
Imagino amaneceres sin ocasos.
¡Vida eterna..., eterno consuelo!.

He visto el fin de cada día,
He visto el fin de tantas vidas,
He visto el ocaso.

¡Tantos finales he visto!, que al final lo entiendo.

Soy ave de paso, estrella fugaz,
No puedo luchar contra la naturaleza.
No soy un dios capaz de alterar el ciclo de la vida,
No soy diferente al resto de generaciones pasadas,
Soy efímero, tan efímero que me da miedo.

Pero quizá la grandeza de todo esto resida hay,
Tengo tan poco tiempo para hacer tantas cosas…,

Quiero forjar un legado que perdure a mi partida,
Quiero dejar una huella que sirva de guía a generaciones postreras,
¡Deseo vivir intensamente!

Como una bella puesta de sol en la calida Toscana,
Así imagino mi ocaso,
La siempre misteriosa y enigmática noche me cubrirá con sus sombras,
Pero no tengo miedo,
¡He vivido!