sábado, 28 de marzo de 2015

Infancia


Cómo añoro la infancia. Esos tiempos en que reíamos por cualquier tontería; llorábamos por tener que terminar de comer; nuestra única meta era jugar; esa felicidad que sentíamos cuando nos compraban chuches; la falta de culpa; o simplemente esa inocencia.
Me gustaría coger esa felicidad y no soltarla nunca..
Echo de menos esos tiempos en que papá y mamá eran todo nuestro mundo, junto con ese parque del día a día, pero lo demás era tierra inexplorada. No sabíamos porqué, solo cómo.
No nos sentíamos mal, no pensábamos en las consecuencias, pero ibamos aprendiendo día a día, poco a poco..sin darnos cuenta nos hacíamos mayores, empezábamos a comprender y a enfrentarnos problemas..
Con el paso del tiempo se aprende de nuestros errores, que te hacen más fuerte, y de que no hay que tener prisa por crecer, porque no hay mayor regalo que el de la ignorancia..
A veces hubiera preferido seguir siendo ese niño pequeño..
Tan solo eso, pequeño.